Jesús, 3000 años antes de Cristo, Segunda parte.

En la Navidad pasada hablaba de las semejanzas entre el Nuevo Testamento y la literatura egipcia acerca del nacimiento de Jesús. Pues bien ahora con la festividad de la Pascua toca hablar sobre la relación entre la muerte y resurrección de Jesús y Osiris. Referencias: Jesús, Evangelio, Egipto, Osiris, muerte, resurrección.

Este post es la continuación y final del articulo «Jesús, 3000 años antes de Cristo«, escrito la Navidad pasada. Si la Navidad representa su nacimiento, la Pascua marca su muerte y resurrección.

 Jesús entra en Jerusalén montado en un asno y es aclamado por la muchedumbre que lo saluda con ramas de palma en las manos. La entrada del mesías esta dentro del contexto de las fiestas de los Tabernáculos. Estas fiestas tenían lugar en las primeras semanas de otoño y se daba gracias a Dios por los frutos recolectados. Tiene origen en los tabernáculos, tiendas o cabañas que levantaban los judíos en los campos durante la temporada de recolección. Durante la fiesta, los judíos iban en procesión al Templo, llevando ramas de palmera, mirto y sauce.

Lo sorprendente para nosotros es porque Jesús monta un asno, pero para un egipcio no sería sorprendente. Le recordaría al mito de Osiris enfrentándose a Seth, su hermano maligno. Podríamos considerarlo, simplificando mucho, como la lucha entre el bien (Osiris) y el mal (Seth). A menudo Seth es representado bajo el aspecto de un asno pelirrojo o como un hombre con cabeza de asno. Cuando Osiris surge vencedor, Seth es aplastado y Osiris monta sobre Seth en forma de asno.

El simbolismo de Jesús entrando en Jerusalén montando un asno es fácil de interpretar en el contexto egipcio. Jesús entra en Jerusalén como vencedor del mal.

Ancestralmente el temor a la muerte por hambre y sed se manifiesta en todas las invocaciones a los dioses. El pan de la vida encarnado en Jesús destinado a dar la vida eterna es un símbolo de Osiris que por su parte se le considera en los textos más antiguos «Es él (Osiris) quien hizo el grano del líquido que hay en él para alimentar a los nobles y al común del pueblo, soberano y señor de las ofrendas alimenticias, soberano y señor de los víveres».

En los ritos egipcios se asocia la muerte de Osiris a la germinación del grano, germinación que simboliza el retorno a la vida de Osiris. El pan hecho con este grano proporciona la vida eterna.

Hay que recordar que Osiris es asesinado por su hermano Seth de forma violenta. La muerte de Osiris permite la germinación del grano, que a su vez debe morir para ser transformado en pan, el pan con que se alimentan los vivos, los dioses y los muertos. El pan simboliza el cuerpo de Osiris.

Recordemos el evangelio de Juan (12,24): «Si el grano de trigo no cae en tierra y muere, queda solo; mas si muere, lleva mucho fruto». Se compara la muerte de Jesús con el grano germinado, que ha de conducir a los hombres a la vida eterna. El pan de vida encarnado por Jesús que da su cuerpo para salvar la vida en el mundo.

De forma general a una divinidad irritada en lugar de sangre se le ofrece vino de forma simbólica, en algunos papiros al vino se le denomina «sangre de Osiris». Osiris ofrece su sangre en una copa de vino a Isis, para que esta no le olvide después de muerte. Este episodio se parece mucho a la eucaristía de Jesús antes de su muerte.

También tenemos la semejanza de Jesús orando solo en el monte de los Olivos, con Ramses II en la batalla de Kadesh. En las dos aparecen estas relaciones, la soledad del personaje, el abandono de sus compañeros, el peligro de la muerte, la oración, los reproches dirigidos a los compañeros. Incluso el faraón, en Egipto el hijo de Dios, llama  a la divinidad «Padre».

Es curioso observar que la muerte de Jesús se produce a la edad de unos 30 años que son los años que indicaban el término de la eficacia de un faraón. Después de un reinado de 30 años el faraón tenía que renovar ritualmente las fuerzas reales en el transcurso de una fiesta, la fiesta Sed. Aunque seguramente en sus inicios ancestrales el faraón era muerto y reemplazado por otro. Tenemos pues, que los destinos del faraón (Osiris) y Jesús son parecidos, los dos aparecen como seres que sufren la muerte por traición, Osiris por su hermano Seth y Jesús por su discípulo Judas.

Los egipcios sentían profundamente la muerte de Osiris, Herodoto cuenta que en Sais, en el santuario de Athena «se dan representaciones de la pasión de Osiris a la que los egipcios denominan misterios». La palabra misterio hay que entenderla en el sentido de drama sagrado, que reproduce una escena religiosa.          

El último acto de la historia de Jesús trata de su resurrección, aunque ninguno de los evangelios la cuenta. Hay unos indicios, entre los cuales están las apariciones a los apóstoles. Las narraciones tiene unos nexos en común, como son la presencia únicamente de mujeres, el descubrimiento del sepulcro vacío, la aparición de un ángel, la noticia de la resurrección y el anunció de la ascensión. Así pues, los primeros testigos de la resurrección son mujeres. Los apóstoles no las creen y Pedro va a verificar sus afirmaciones, pues en Palestina se podía poner en duda el testimonio de las mujeres. No ocurre lo mismo en Egipto, en donde desde la época faraónica la mujer tiene los mismo derechos que el hombre.

En los evangelios aparecen uno o dos ángeles, para los egipcios serian Isis y Neftis velando el lecho en el que se encuentra el cuerpo de Osiris. Isis en forma de ángel tal como lo entendemos nosotros, con las alas desplegadas. En el mito egipcio las alas de Isis representan el aliento necesario para resucitar a Osiris.

Según los evangelios Jesús murió el viernes, vigilia del sábado y resucitó el domingo por la mañana. Pasaron tres días antes de resucitar, aunque es una fórmula de salvación utilizada en el lenguaje de la época. Por ejemplo en el Midrash a propósito de Gen se lee «el Santo, que sea alabado, no deja jamás a los justos tres días en el desamparo». Igualmente sobre José, Jonás, Mardoqueo y David se dice «Después de dos días nos devolverá la vida, el tercer día él nos levantará, y viviremos en su presencia». Recordemos la historia de Jonás que permaneció tres días y tres noches en el vientre de un pez.

Quizá esta creencia popular aparece como consecuencia de que el cuerpo de un muerto empieza a descomponerse al cabo de tres días. Esta cifra de tres tiene un simbolismo en casi todas las civilizaciones. También puede interpretarse en el siguiente contexto astronómico, durante veintiocho días aparece la luz de la luna, desaparece y al tercer día vuelve a aparecer. Osiris muere a los veintiocho años y resucita después de tres días.

Evidentemente el concepto de resurrección es mucho más complejo, ¿se trata de la resurrección del cuerpo, del alma o de los dos?. Jesús aparece como un ser de carne y hueso pero al mismo tiempo los apóstoles primeramente lo desconocen. Es un cuerpo transformado y transfigurado por la resurrección.

Según los Textos de las Pirámides, la resurrección es una resurrección del cuerpo, pero es un cuerpo transformado que rehúsa permanecer en la tierra. El retorno a la vida es un renacimiento donde la purificación y el agua tienen un papel decisivo. Osiris es rey y pastor, pastor de su pueblo, que por su muerte y resurrección permite a los difuntos resucitar a su vez.

En definitiva, el Evangelio está hecho a imagen y semejanza de la religión egipcia.

Por Carles Paul

Licenciado en Ciencias Físicas por la Universidad de Barcelona, Master en Física y Matemática Aplicada por la Universidad Politécnica de Cataluña y Master en Historia de la Ciencia por la Universidad Autónoma de Barcelona. Técnico Experto Evaluador Europeo. Profesor titulado de física y matemáticas de la Politècnica de Mataró, des de 1991. Director Científico de Innovem.

10 comentarios

  1. Muy interesante.

    Un fallo (o estoy dormido). El enlace a la primera parte, pare el que le interese refrescarla, y / o leer las dos seguidas.

  2. Grácias por tu observación, queria tener el articulo publicado antes de irme de vacaciones y las prisas….

    De paso he puesto un enlace de la primera parte a la segunda.

    Saludos!

  3. muy buen texto , hace dias vi el documental Zeitgeist , y queria comprobar si era realmente cierto , y asi lo hice gracias en parte a esto q has escrito , gracias buen aporte

  4. Si muerte y resurrección en el cuerpo de gloria se repiten de una u otra forma, Ver ODIN, QUE PERMANECIÓ 9 DIAS Y NUEVE NOCHES COLGADO DE AUN ARBOL, MURIO Y RESUCITO CON LA SABIDURIA DE LAS RUNAS NORDICAS. DIOS CHAMAN./ KRISHNA, DIOS INDU,DEJO LA TIERRA Y ASCENDIO CON SU PROPIO CUERPO DE GLORIA, TENIA 125 AÑOS EN EL MUNDO TERRENAL, Y SIEMPRE LO VIERON COMO UN JOVEN DE 16 AÑOS, TENIA EL CUERPO AZUL COMO LAS NUBES DE TORMENTA,DESAPARECIO Y ASCEDIO A SU MORADA ETERNA, HIZO PRODIGIOS Y MARAVILLAS, LEER BAGAVAD-GITA, DONDE LE ENSEÑA A SU DEVOTO ARJUNA. JESUS MUERTE EN CRUZ, RESUCITA ENTRE LOS MUERTOS CON SU CUERPO DE GLORIA, SINTESIS ENTRE EL CUERPO FISICO Y EL ESPIRITUALMISTERIO PARA NOSOTROS).rESUCITA EL MISMO CUERPO FÍSICO PERO CAPACITADO POR EL ESPIRITU PURO PARA ASCENDER A LA MORADA DEL PADRE…..sALUDOS

  5. creer en Dios altisimo y su hijo nos salva despues de la muerte pero al no creer nos pierde ,por que les duele tanto creer en Dios solo enseña a amar y a creer si mueres creyendo filosofia barata pierdes si mueres creyendo en JESUS el hijo de Dios te SALVAS..y no has perdido nada a no ser que te guste hacer el mal por que siempre el ser humano a necesitado creer en algo o alguien si leen la biblia pidiendo sabiduria comprenderan que la historia tambien se equivoca y la biblia es el escrito original los demas son los imitadores , por que DIOS nos creo primero y nos ama hasta la eternidad … El es el principio y el fin… bendiciones.

  6. No soy ninguna neofita en el tema, pero quiero dar mi opinion al respecto como mera observadora y,creo, que persona objetiva. Creo que la religion catolica y el misterio de Cristo esta basado en religiones tan antiguas como la humanidad misma como Tamuz en Mesopotamia, Adonis en Siria, Attis es Asia Menor y Osiris en Egipto que ya predicaban con la resurrecion y la vida eterna, es tanto asi como que lo simbolizaban con los ciclos de las cosechas para darnos de comer y su ciclo de crecimiento y muerte. Asi como nosotros nacemos servimos a nuestro semejantes y morimos, aunque la vida en la tierra continue cerrando asi un ciclo de vida en la tierra y consolidando la vida eterna como un conjunto de almas y no como un ser inmortal aisladamente de los demas.

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